Las medidas con las que Lollapalooza buscará mantener su "espíritu verde" en Chile

Con más de 1.000 voluntarios que enseñarán a reciclar y separar basura que es posible reutilizar, además de la presencia de 200 contenedores y 30 "puntos verdes", el debut del festival de Lollapalooza en Chile buscará mantener el tono ecológico que lo ha caracterizado desde su nacimiento.

"Compartir acá en Santiago esta idea que se originó en el Festival en Estados Unidos es realmente importante y esperamos que quienes asistan lo entiendan así, ya que todos podrán participar reciclando y cuidando el parque durante el evento", afirmó Perry Farrell, líder del grupo Jane's Addiction y creador de la cita musical.

La iniciativa avalada por el Ministerio de Cultura en alianza con la cartera de Medio Ambiente, incluye también la medición de la huella de carbono de los asistentes y la repartición de unos 20 mil árboles de forestación urbana.

Luego del concierto, la Municipalidad de Santiago se unirá a esta campaña llamada "Cultura Verde" para realizar un plan de aseo en el Parque O'Higgins, que abarcará un perímetro de 6 kilómetros de barrido, con más de 130 personas dedicadas a estas labores de limpieza.

"Queremos que Lollapalooza en Chile sea un festival limpio, con la menor cantidad de contaminación posible y que compense las emisiones que acá se generen", comentó la ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, durante el anuncio de esta mañana. La secretaria de Estado añadió que espera que el público, a través de acciones concretas, pueda reducir la contaminación que en general presentan eventos masivos.

El ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, se sumó afirmando que espera que Lollapalooza sea un precedente para futuros espectáculos de este tipo. "Buscamos ligar cultura con un comportamiento cívico, que no se estigmaticen los recintos donde se presenta el rock como lugares que quedarán sucios. Que no se asocien los eventos masivos con basura", dijo.