Los británicos volvieron a reclamar que el presidente de Estados Unidos deje de usar sus canciones en actos de campaña. El BMI, organismo estadounidense que protege los derechos de autor en la música, comunicó al equipo de campaña de Trump que no tiene autorización para utilizar las composiciones de la banda.
A pesar de que el primer reclamo se realizó en 2016, Donald Trump utilizó el tema You Can’t Always Get What You Want en su último encuentro por la reelección en Oklahoma. Frente a esto, el BMI aseguró que si el presidente no desiste y deja de usar la música de los Stones, tendrá que rendir cuentas en la Justicia.
"A pesar de las directivas de cese y desistimiento de Donald Trump en el pasado, los Rolling Stones están tomando medidas adicionales para impedir que utilice sus canciones en el futuro en cualquiera de sus campañas políticas. El equipo legal de los Stones ha notificado a la campaña de Trump en nombre de la banda que el uso no autorizado de sus canciones constituirá una violación de su acuerdo de licencia. Si Donald Trump ignora la exclusión y persiste, se enfrentará a una demanda por reproducir música de manera no autorizada", dice el comunicado publicado en el sitio Deadline, y luego difundido por las cuentas oficiales de la banda.
De esta manera sus majestades satánicas se suman a la cada vez más grande lista de artistas que se manifiestan contra Donald Trump y le prohíben la utilización de sus composiciones. Queen, Neil Young, Josh Homme, Pharrell Williams y Rihanna, por nombrar algunos.
Recientemente fue la familia del fallecido Tom Petty la que prohibió que Trump utilizara I Won’t Back Down en sus actos.
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