Llegué al Club Hípico a eso de las 5 de la tarde, todo en orden y la entrada era expedita, carabineros patrullando como siempre para eventos masivos.
Aunque la caminata desde la entrada del Club Hípico hasta la explanada en dónde se ubicaban los 3 escenarios dispuestos para ese día de Maquinaria, el ánimo no decaía en las caras de quienes caminábamos en grupos hacía aquel sector, preparados para vivir un día inolvidable.
Cuando llegué estaban preparando el escenario para que empiece el show de Calavera Conspirancy, junto a mi hermano recorrimos el parque para ver dónde estaban las diversas zonas: de comida, de baños, áreas verdes, sombra, merchandising, etc.
Nos dirigimos al escenario verde, ya que íbamos a ver ahí a Queens of the Stone Age y a Linkin Park. Estuvimos escuchando Calavera Conspirancy, debo decir que, aunque no me agrada ese estilo de música, la banda sonaba excelente, se notaba que llevan años (recuerden que fueron parte de la banda llamada Sepultura famosa en los años 90), quienes fueron a verlos disfrutaron el espectáculo.
Luego vino la larga espera por Queens of the Stone Age, se me hizo eterna, entre el calor, el tumulto de gente que se peleaba por estar lo más adelante posible y los roadies (bastante lentos) que probaban los micrófonos cada 5 segundos. Pero cuando Josh Homme y compañía saltó al escenario se nos olvidó todo eso, y empezamos a disfrutar de ese rock stoner (como le llaman) a concho, el sonido espectacular, un show impecable, el setlist con sus canciones más famosas, las intervenciones de Josh las precisas y con frases para el bronce como cuando dijo ‘it’s fuckin’ wonderful… la luna, las etrellas y ustedes aquí’. Confieso que me enamoré del sonido en directo de la banda, yo los conocía muy poco, pero bailé todas las canciones, canté las que me sabía. Algo inolvidable haberlos visto.
Al terminar QOTSA, empezaba la espera por ver, después de 10 años de escucharlos, a Linkin Park. Mientras en el escenario rojo ya empezaba el show de Pixies, impecable también, su música acompañó la espera por la banda estadounidense de nuestra adolescencia.
Cuando mirabas al público que estaba esperando por Linkin Park la mayoría éramos de unos 23-24 en promedio, muchos con más años también.
Veíamos como instalaban el escenario y los nervios por verlos al fin en vivo en nuestro país aumentaban. Cuando subieron al fin al escenario verde, comenzó un éxtasis del re-encuentro con su público cautivo. Aunque eran muy pocos quienes conocían el nuevo álbum, “A Thousand Suns”, que vinieron a presentar a Sudamérica, todos coreamos sus clásicos del “Hybrid Theory” y del “Meteora”, y los éxitos más recientes del “Minutes To Midnight” (el disco anterior). Demostraron que en vivo suenan tan bien como en el disco y que sus shows en cualquier rincón del mundo tienen el mismo nivel que los que han grabado para DVD’s. Quedé feliz y satisfecha con aquel show.
Luego para cerrar la jornada, e inmediatamente después de que Linkin Park se bajó del escenario, en el escenario rojo comenzaba el show de Incubus, estaba bien lejos así que el show no lo pude apreciar mucho, pero me deleité escuchando aquellos temas que acompañaron mi adolescencia como “Drive”, “Megalomaniac” y “Wish You Were Here”, los fans por supuesto felices de oírlos una segunda, tercera o incluso cuarta vez, recordemos que Incubus dio dos shows en nuestro país el 2007, al igual que esta vez.
Espero que este festival se repita, excelente trabajo de la organización y de quienes trabajaron en lo que es sonido y equalización de cada banda. Todo perfecto en ese punto, algo importante cuando uno asiste a un espectáculo así.
FOTOS
MAX CALAVERA
LINKIN PARK
PIXIES
UNA VISTA
VIDEOS
LINKIN PARK
PIXIES
QUEEN OF STONE AGE
Cavalera Conspiracy
INCUBUS
NOTA POR
Gladys Zapata
FOTOS POR JAVIER
No hay comentarios:
Publicar un comentario
que te parecio esta noticia esperamos tus comentarios