viernes, 22 de noviembre de 2013

Ennio Morricone se reune con presidente sebastian piñera en la moneda y habla de chile

Ya se mueve casi como por casa, Ennio Morricone en Chile. Tras su recordado paso de 2008 —cuando miles de personas incluso pasaron la noche fuera de la Estación Mapocho, con tal de conseguir entradas al evento gratuito— y su regreso en 201

1, el maestro italiano nuevamente está en suelo nacional, donde su figura ya se ve por los más diversos lugares.

Ya ha estado en los patios de la Universidad de Santiago, donde ha ensayado con la Orquesta y Coro de esa casa de estudios, en el Aula Magna de la misma. O en el Palacio de la Moneda, donde este jueves se reunió con el Presidente Sebastián Piñera.

Todo con miras al hito que anotará este domingo 24, cuando se presente ante cerca de 20 mil personas en el Estadio Bicentenario de La Florida —con apertura a cargo de Mike Patton y su proyecto "Mondo Cane"—, más la gala que el martes 26 ofrecerá en Arena Monticello.

"Sólo tengo que agradecer a este público que ha sido tan generoso y sentimental, y con tanto interés hacia mi música, que próximamente volverán a escuchar", dice el maestro italiano a Emol, de cara a esta nueva fecha, en la que nuevamente enfatizará en las bandas sonoras que ha escrito para diversas películas.

Las piezas que inmortalizaron cintas como "Los Intocables", "Érase una vez en América", "El Bueno, el Malo y el Feo" y "Cinema Paradiso", se alternarán con otras de producciones europeas menos conocidas en Chile, luego de que el líder de Faith No More presente el más convencional de sus proyectos, anclado en el repertorio tradicional italiano.

Morricone no esconde su entusiasmo, especialmente cuando recuerda su agitada visita de 2008 y la expectación que ella generó. "De eso me di cuenta porque lo vi en televisión, que la gente iba con mucha gentileza, interés y generosidad a escuchar los conciertos. Qué quiere que le diga, esto me hace muy feliz y espero que se repita esta vez", afirma.

-Esa ansiedad y convocatoria aquí son muy inusuales para el tipo de música que usted compone e interpreta. ¿Por qué cree que se provoca eso alrededor suyo?-No lo sé, es un análisis musical que no me corresponde hacer a mí, sino a los estudiosos, a los musicólogos, que deberían entenderlo un poco más. Pero el hecho de que mi música logre comunicar a la gente de distintos pueblos, esto es para mí realmente un misterio.

-¿Cree que esos episodios registrados en Chile son señal de cómo usted ha logrado ampliar los horizontes de la música orquestal, hacia el mundo de lo popular?-No me pregunte cómo lo hice, porque no lo sé. Yo sólo escribí la música que sentía, que pensaba, con la que de alguna manera me formé, en la técnica, la fantasía. Por lo tanto, el haber llegado a este extraño milagro de comunicarle a la gente de manera feliz... Es difícil (de explicar).

-¿Esa ampliación de horizontes, estaba entre sus objetivos iniciales como compositor y como músico?-Yo he tenido la suerte de tener varias experiencias musicales antes de ser compositor, y sucesivamente desde que me convertí en compositor. Las más extrañas: Por ciertas canciones, por la música de la radio, por la televisión, por los discos, los discos comerciales, los discos difíciles. Esta experiencia formó poco a poco mi estilo, lo que podemos llamar "estilo", por lo tanto su formación es muy misteriosa. Y al interior de estas características, hay varios tipos de especulaciones del compositor, sobre qué es lo que hace cuando busca. Y encuentra.

-Esta vez tocará con músicos de la Universidad de Santiago. Antes lo hizo con la Sinfónica de Chile y el Coro Sinfónico. ¿Con qué opinión se quedó de las agrupaciones chilenas y del nivel de las orquestas en nuestro país?-Por lo que yo recuerdo, me sentí muy cómodo, una orquesta generosa que sabe estar concentrada y atenta. Yo recuerdo cosas muy buenas, puedo afirmarlo, espero que sea igual de buena la orquesta con la cual trabajaré esta vez.

La jornada con Morricone y Patton tiene largada fijada para las 18:00 horas de este domingo con la presentación del norteamericano. Según cifras de los organizadores, ya están vendidas el 80 por ciento de las entradas, aunque aún quedan disponibles boletos entre $25 mil y $220 mil.

Para el martes 26, en tanto, está agendada una gala sólo para 2.500 espectadores en Arena Monticello, con boletos disponibles entre $30.000 y $120.000. Las entradas para ambos eventos se venden a través de Feria Ticket.

reportaje gentileza emol chile

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